A menos de dos meses de realizarse la primera vuelta electoral, Ecuavisa hace un recorrido por la historia reciente de nuestra democracia. Un recuento de los momentos políticos más relevantes de cuatro décadas en las que Ecuador debió tener diez presidentes y terminó teniendo trece.

Dolarización, migración, inestabilidad y socialismo

Entre 2000 y 2017 Ecuador tuvo cuatro presidentes. Ya dolarizado, en los primeros años de este periodo el país sufrió los estragos de una crisis económica que obligó a emigrar a más de 900.000 ciudadanos.

Tras el derrocamiento de Jamil Mahuad, el entonces vicepresidente Gustavo Noboa asumió el poder en el año 2000. En su gobierno se renegoció la deuda externa y se impulsó la construcción del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP).

En 2003 lo sucedió Lucio Gutiérrez, quien posesionó a militares en ministerios y empresas del Estado, ordenó aumentar los precios de los combustibles y facilitó el regreso del expresidente Bucaram.

Su administración, que se suponía iba a culminar en 2007, terminó dos años antes, luego de ser destituido. Su vicepresidente Alfredo Palacio, quien ya se había alejado del régimen, lo reemplazó.

Entre 2005 y 2007 Palacio intentó impulsar una reforma política que no se llevó a cabo, pues encontró trabas en distintas instituciones del Estado. A Palacio lo sucedió quien fue un exministro de su gabinete, que había ganado las elecciones en 2006: Rafael Correa.

Correa gobernó por 10 años, en tres mandatos consecutivos. En su gobierno se creó una nueva Constitución. Hubo alta inversión estatal gracias al elevado precio del petróleo y el alto endeudamiento externo. Hoy la mayoría de esas "megaobras" son investigadas por sobreprecios.