Laurito demanda a Barcelona

El delantero argentino, Federico Laurito, demandó a Barcelona por falta de pago y dejó una explicación de sus motivos en su cuenta en la red social Twitter.

Laurito explicó en su cuenta, a los aficionados y público en general, su llegada a Barcelona y las penurias que ha pasado durante los 7 meses que ha estado ligado a la institución.

El jugador indicó que dejaba la explicación para que todos sepan la verdad y apuntó que la afición y el periodismo siempre lo trató con respeto y cariño, pese a que no pudo cumplir con sus objetivos personales.

Indicó que por una gestión personal de "Toño" Noboa, presidente de Barcelona, decidió fichar por la institución guayaquileña, en contra de la voluntad de su representante y la Universidad Católica, que pretendían colocarlo en el Almería de España.

Apuntó que el 15 de enero firmó su contrato y desde ahí hasta ahora, solo se le ha candelado 15 días de enero y el arriendo de su viviendo hasta febrero, y los siguientes cuatro meses y medio han corrido por su cuenta.

Detalla que "a pesar de que me lesioné en campo, y no obstante de haber jugado nueve partidos (lamento en el alma que esos haya sido los peores partidos del equipo y quizás los mios en general), nunca el Barcelona me ha pagado una sola placa radiográfica ni resonancia magnática referida a la operación de mi rodilla, todo lo he abonado yo de mi bolsillo".

Aclaró que los gastos de su operación corrieron por su cuenta, pero eso sí fue mutuo acuerdo con el club, que le permitió realizarse la intervención en Argentina.

Laurito detalló que no solo en eso gastó, sino que también tuvo que pagar su visa de trabajo y los pasajes para Argentina que por contrato le correspondían.

Agregó que "solo Lucho Noboa, a quien le estoy agradecido, ha tratado de llegar a un acuerdo conmigo pero no lo hemos podido lograr, es debido a esto que he presentado la demanda para la libertad de acción por falta de pago y ejecutar todo el contrato".

El jugador finaliza apuntando que está en Argentina realizando la última etapa de su recuperación y que cuando tenga el alta debe presentarse a la Universidad Católica, club dueño de sus derechos deportivos.